Luna

Luna

lunes, 25 de abril de 2011

Quién es tu mamá?

Mamá es esa señora que lleva en el bolso un pañuelo con mis mocos, un paquete de toallitas, un chupete y un pañal de emergencía

Mamá es ese cochete tan rápido que va por casa disparado y que está en todas partes al mismo tiempo.

Mamá es esa malabarista que pone la lavadora con el abrigo puesto mientras le abre la puerta al gato con la otra, sosteniendo el correo con la barbilla y apartándome del cubo de basura con el pie.

Mamá es esa maga que puede hacer desaparecer lágrimas con un beso

Mamá es esa forzuda capaz de coger en un solo brazo mis 15 kilos mientras con el otro entra el carro lleno de compra

Mamá es esa campeona de atletismo capaz de llegar en décimas de segundo de 0 a 100 para evitar que me descuerne por las escaleras.
Mamá es esa heroina que vence siempre a mis pesadillas con una caricia .

Mamá es esa señora con el pelo de dos colores, que dice que en cuanto tenga un huequito, va a la pelu.

Mamá es esa cuenta cuentos que lee e inventa las historias más divertidas sólo para mi.

Mamá es esa chef que es capaz de hacerme una cena riquisima con dos tonterias que quedaban en la nevera porque se le olvidó comprar, aunque se quede ella sin cena.

Mamá es ese médico que sabe con sólo mirarme si tengo fiebre , cuánta y lo que tiene que hacer.

Mamá es esa economista capaz de ponerse la ropa de hace muchos años para que yo vaya bien guapo.

Mamá es esa cantante que todas las noches canta la canción más dulce mientras me acuna un ratito.

Mamá es esa payasa que hace que me tronche de risa con solo mover la cara.

Mamá es esa sonámbula que puede levartarse dormida a las 4 de la mañana, mirar si me he hecho pis , cambiarme el pañal , darme jarabe para la tos, un poco de agua, ponerme el chupete, todo a oscuras y sin despertarse.

¿La ves?... Es aquélla, la más guapa, la que sonrie

Sueño

Sueño con un beso tuyo
y ni siquiera sé sí quieres besarme
Sueño con una palabra tuya
y ni siquiera sé sí quieres hablarme.
Sueño que me amas en silencio
pero ese silencio mata mis sueños
bésame..háblame...ámame
y despiertame de este infierno.

Pobre niña rica

Cuando era niña, vivía en un sitio dónde apenas habia niños cerca de casa , asi que pocas veces podía salir a jugar. Con el tiempo frente de casa se mudó una familia que tenían una sóla hija, era algo más pequeña que yo. y nos fuímos haciéndo amigas. Esa niña, era hija única y sus padres eran gente acomodada. Algunas tardes su madre llamaba , para decirle a mi madre que me dejase ir a su casa un ratito para jugar con su hija, yo por supuesto me ponia muy contenta al ver que me iba ha jugar con ella, tenia todos los juguetes que salian por televisión y nos lo pasábamos muy divertido con todos aquellos juguetes que yo nunca jamás llegué a tener.... Un año, cuando llegó navidad, pasaron por alli sus majestades los Reyes de Oriente.. y nuevamente mi amiga, tenia todo lo que aquel año salia por la televisión... Me volvieron a llamar para ir de nuevo a jugar con ella y ver todo lo que le habian traido los reyes y cuál fue mi sorpresa que vi el maletin de la Señorita Pepis... bufffff ese que tantas veces veia por la tele y que pedi en mi carta a los Reyes Magos pero que nunca me puedieron traer! Me volví loca ese dia jugando a ser princesas ..En fin, para acortar un poquito el tema, los meses fueron pasando y pasando...una noche estando asomada una vez más por esa ventana de la que os he hablado otras veces.. miré al portal de su casa y una persona del servicio tiró la basura.. me quedé por un momento mirando desde ahi arriba aquellas bolsas y algo asomaba que parecia que fuese el maletin de la Señorita Pepis... no podia ser!! estaba viendo visiones... cómo iban a tirar aquel tesoro!!! Pero aquello parecía el maletin.. total que le dije a mi madre.. -!Mamá voy a bajar la basura! y baje corriendo las escaleras de mi casa de tres en tres.... crucé la calle y cogi el maletin, no me lo podia ni creer!!! Lo habian tirado y ahora era mio!!!! Subi las escaleras de casa de cuatro en cuatro escalones y entre como una bala por el pasillo para decirle a mi madre..Mamá los reyes magos me han traido el maletin de la Señorita Pepis!!!!

Vivencias

Solía acercarme de niña a la ventana de mi casa los dias de lluvia. Me gustaba observar desde alli arrriba como pasaba la gente con sus paraguas abiertos de colores brillantes... cada uno diferente a otro. Me pasaba las horas mirando los diferentes dibujos y cómo se iban perdiendo poco a poco al final de la calle. Eran días felices aquellos, desde esa ventana ví pasar mi niñez y también parte de juventud. Las primeras ilusiones amorosas y también las primeras lágrimas de decepción. Mi ventana era un ventana abierta al mundo, desde ahi arriba .. empecé a ver la vida

Las apariencias

Moses Mendelssohn, abuelo del conocido compositor alemán, distaba de ser guapo. Además de una estatura algo baja, tenia una grotesca joroba.

Un día visito a un mercader de Hamburgo que tenia una hermosa hija llamada Frumtje. Moses se enamoro perdidamente de ella, pero a ella le repelía su apariencia deforme. Cuando llego el momento de despedirse, Moses hizo acopio de su valor y subió las escaleras hasta donde estaba el cuarto de aquella hermosa joven, para tener la ultima oportunidad de hablar con ella. Era tan hermosa, pero a Moses le entristecía profundamente su negativa a mirarlo.

Después de varios intentos de conversar con ella, le pregunto tímidamente:

- Crees que los matrimonios se crean en el cielo?,

- Si - respondi ella, todavía mirando al suelo - Y tú ?...

- Si, lo creo - contestó -. Verás:

En el cielo, cada vez que un niño nace, el Señor anuncia con que niña se va a casar. Cuando yo nací, me fue señalada mi futura esposa.

Entonces el Señor añadió: "Pero tu esposa será jorobada". Justo en ese momento exclamé: "Oh, Señor, una mujer jorobada seria una tragedia, dame a mi la joroba y permite que ella sea hermosa".

Entonces Frumtje levantó la mirada para contemplar los ojos de Moses y un hondo recuerdo la conmovió. Alargo su mano y se la dio a Moses, tiempo después, ella se convirtió en su esposa.....
Autor: Desconocido

Hay dias...

Hay días .....
que vivir no quiero,
nadie me espera,
nadie me sueña.
Rutina, dolor y miedo
compañeros de un viaje absurdo.
En mi mochila sólo tu recuerdo

La felicidad

Cuenta la leyenda que un hombre oyo decir que
la felicidad era un tesoro.



A partir de aquel instante comenzo a buscarla.
Primero se aventuro por el placer y por todo
lo sensual, luego por el poder y la riqueza,
despues por la fama y la gloria, y asi fue
recorriendo el mundo del orgullo, del saber,
de los viajes, del trabajo, del ocio y de
todo cuanto estaba al alcance de su mano.
En un recodo del camino vio un letrero que
decia: "Le quedan dos meses de vida."
Aquel hombre, cansado y desgastado por los
sinsabores de la vida se dijo:

"Estos dos
meses los dedicare a compartir todo lo que
tengo de experiencia, de saber y de vida
con las personas que me rodean."

Y aquel buscador infatigable de la felicidad,
solo al final de sus dias, encontro que en
su interior, en lo que podia compartir,
en el tiempo que le dedicaba a los demas,
en la renuncia que hacia de si mismo por
servir estaba el tesoro que tanto habia deseado.

Cuando una de las puertas de la felicidad se
cierra, otra se abre, pero, a menudo, miramos
tanto la puerta que se ha cerrado que no vemos
aquella que se ha abierto para nosotros.

Comprendió que para ser feliz se necesita
amar; aceptar la vida como viene; disfrutar
de lo pequeño y de lo grande; conocerse a
si mismo y aceptarse asi como se es;
sentirse querido y valorado, pero tambien
querer y valorar; tener razones para vivir
y esperar y tambien razones para morir
y descansar.

Entendió que la felicidad brota en el corazón,
con el rocio del cariño, la ternura
y la comprension.
Que son instantes y momentos de plenitud
y bienestar; que esta unida y ligada a la
forma de ver a la gente y de relacionarse
con ella; que siempre esta de salida y que
para tenerla hay que gozar de paz interior.

Finalmente descubrió que cada edad tiene su
propia medida de felicidad

La felicidad es como una mariposa que,
cuando se le persigue,
siempre esta fuera de nuestro alcance:
pero que, si te sientas
silenciosamente, puede posarse en tí...



jueves, 21 de abril de 2011

Me tendí sobre la hierva entre los troncos

que hoja a hoja desnudaban su belleza

Dejé el alma que soñase:

Volvería a soñar en primavera

Nuevamente, nace el mundo nuevamente

naces , alma (estabas muerta)

Yo no sé lo que ha pasado en este tiempo:

Tú dormías, esperando ser eterna.


Y por mucho que te cante la alta música

de las nubes, y por mucho que te quieran

explicar las criaturas por qué evocan

aquel tiempo negro y frio , aunque pretendas

hacer tuya una vida derramada

(era vida, y tú dormías), ya no llegas

alcanzar la plenitud de su alegría:

Tú dormías cuando todo estaba en vela.

Tierra nuestra, vida nuestra, tiempo nuestro..

(Alma mía , !Quién te dijo que durmieras¡

José Hierro

El parto de una lagartija

Si has tenido niños, y has sufrido el "síndrome del veterinario", incluyendo algún funeral en la taza del inodoro por un pez de colores, esta historia te hará reír a carcajadas...


Resumen: tuve que llevar la lagartija de mi hijo al veterinario

Esto fue lo que ocurrió:


Una noche, justo después de cenar, apareció mi hijo para decirme que a una de las dos lagartijas que tenía prisioneras en su habitación le pasaba algo raro.


"Está tumbada y parece enferma", me dijo. "te lo digo en serio, papi. ¿Me puedes ayudar?"


Puse mi mejor cara de sanador de lagartijas, y le seguí hasta su habitación. Efectivamente, una de las dos lagartijas estaba tumbada boca arriba, y parecía muy nerviosa. Supe inmediatamente qué hacer.


"Cariño, ven a ver a su lagarto "


"¡Dios mío!" exclamó mi mujer. "Está dando a luz."
"Qué?" preguntó mi hijo. "Si se llaman Bert y Ernie , mami!"


Yo me quedé igual de estupefacto.


"¡Oye, cómo puede pasar esto? Creí que habíamos acordado que no queríamos que parieran". Le dije a mi mujer, acusadoramente.


"Ya, pero y qué quieres que hiciera, ¿Ponerles un cartel en la jaula?¨, me respondió. (¡Me pareció que lo decía con mucho sarcasmo!)


"No, pero se supone que debías haber comprado dos machos!" "¡Exacto, Bert y Ernie!", mi hijo me apoyaba.


Para entonces, el resto de la familia ya estaba allí, a ver qué pasaba. Me encogí de hombros, tratando de sacar el mejor provecho de la situación.


"Chicos, esta va a ser una experiencia fantástica" les dije: "estamos a punto de ser testigos del milagro de la vida"


"¡Oh , animal!", me Chillarón .


Escudriñamos al paciente con detenimiento, y después de mucho esfuerzo, vimos cómo algo parecido a una pequeña pata aparecía brevemente, volviendo a desaparecer tras un segundo escaso.

"No parece que estemos mejorando esto mucho", comenté.


"Viene de pié", susurró mi esposa, horrorizada.


"¡Haz algo, papi!", gritaba mi hijo.


Delicadamente, pillé la pata a la siguiente vez que apareció, y tiré de ella con suavidad. Pero volvió a desaparecer. Lo intenté varias veces más, con el mismo resultado.


"¿Llamo al 911?", sugirió mi hija mayor.


"A lo mejor nos ayudan en el parto." (¿Imaginan la escena, rodeado de mujeres?)


"Vamos a llevar a Ernie al veterinario", dije seriamente. Nos metimos en le coche, mi hijo llevaba la jaula sobre sus rodillas.


"Respira, Ernie, respira", decía para animar a la lagartija.


El veterinario se llevó la lagartija a la sala de exploración, y observó detenidamente al animal con una gran lupa.


"Qué piensa doctor, ¿Quizá una cesárea?", le sugerí científicamente.


"Esto es muy interesante", murmuró el veterinario de repente. "Señor y Señora Cameron, ¿Puedo hablar con ustedes en privado un momento?"


Tragué saliva, y le indiqué a mi hijo que saliera con un movimiento de cabeza.


"¿Ernie está bien?", preguntó mi mujer .


"Está perfectamente", nos aseguró el veterinario.


"Esta lagartija no está de parto... de hecho, eso nunca ocurrirá. Ernie es un macho. Vea, Ernie es un macho joven. Y de vez en cuando, según va llegando a la madurez, como muchas otras especies... pues.... vaya.... que se masturba. Justo como acaba de hacer, tumbándose de espalda". Se puso colorado, mirando de reojo a mi mujer.


Nos quedamos en silencio, tratando de asimilar aquéllo.


"O sea que Ernie está..está...simplemente... excitado", concluyó mi mujer.


"Exacto", replicó el veterinario, aliviado porque lo habíamos entendido.


De nuevo el silencio. Hasta que mi maliciosa y cruel de mi mujer empezó a sonreír, a reírse por lo bajo, un poco más alto. Y al final a carcajadas.


Le caían lágrimas por la cara. "Es que...me viene a la cabeza la imagen de verte tirando de......su...pequeña....." tuvo que parar a coger más aire para la siguiente carcajada.


"¡Ya vale!", le advertí. Le dimos las gracias al veterinario y salimos de allí a toda velocidad, metiéndonos en el coche.


Mi hijo estaba muy contento de que todo hubiera ido bien.

"Sé que Ernie te está realmente agradecido por lo que has hecho, papi.", Me dijo.


"Oh, no sabes cuánto", apostilló mi mujer, casi ahogándose de risa.




Dos lagartijas: $140.
Una jaula: $50.
Veterinario: $90.

El recuerdo de un papá tirando del pene de una lagartija: ¡No tiene precio!


Moraleja de esta historia: ¡Pon más atención en las clase de biología. Las lagartijas ponen huevos!

lunes, 18 de abril de 2011

He decidido...

He decidido dejar de lamentarme, de quejarme cuando todo sale mal...
He decidido hablar menos y escuchar mas...
He decidido aprender de los errores y si vuelvo a cometer los mismos..
He decidido no lamentarme por ello y ser consecuente.
He decidido reir más y llorar menos... y si lloro .. que sea de alegria y nunca perder esa capacidad de emocionarme...
He decido vivir el presente, sin pensar en que lo mejor está por llegar y si llega, he decido vivirlo intensamente...
He decido sorprenderme a mi misma haciendo cosas qué nunca antes hubiese hecho, comper las reglas y jugar a las verdades a medias pues la sinceridad no siempre nos hace mejores y ser comprendida....
He decido amarte hasta mas allá del infinito... y una vez pasado el infinito.. ir y venir miles de veces, hasta saciar mi sed de ti... Y perderme en tu mirada para siempre.
He decidido vivir mi vida... Es demasiado pedir?